martes, 7 de noviembre de 2017

El Premio Paul Ricard apuesta por la pintura figurativa

'Concorde, 1998' de Alba Cortés García


La visita ayer a la exposición de los finalistas y ganadores del Premio de pintura Paul Ricard en la Sala Laraña de la Facultad de Bellas Artes fue de lo más enriquecedora. Cuando entré dos señoras estaban comentando las exposiciones que iban a ver a lo largo de la mañana dentro de su particular ruta artística. Me pareció esperanzador que una mañana de lunes dos amigas se dedicaran a recorrer diferentes espacios culturales para conocer la programación cultural de su ciudad. En segundo lugar, otra mujer que estaba visitando la exposición se me acercó para preguntarme mi opinión sobre la misma. Estuvimos hablando de la relación entre artista y público a través de su obra, de cómo el lenguaje utilizado en la misma puede ser fundamental para que el espectador se enfrente de otra manera a la obra de arte y de cómo el arte figurativo parece más cercano para el gran público que lo abstracto y lo conceptual.




'La dama del lago' de Miguel Gómez Losada 


El Club de Arte Paul Ricard nace en Sevilla en 1999 como plataforma de apoyo a los jóvenes artistas. Su premio anual de pintura se ha convertido en una oportunidad para pulsar la creatividad en nuestra ciudad. Si bien es cierto que año tras año algunos artistas siempre quedan finalistas, resulta interesante que un Premio de estas características apueste por los jóvenes valores y de visibilidad al arte figurativo, que en muchas ocasiones queda en un segundo plano frente a propuestas más conceptuales.


'Divisiones' de Norberto Álvarez Gil

'More human than human' de Juan Daniel Díaz Moreno


La ganadora de esta XIII edición ha sido Alba Cortés García (Cáceres, 1991) con su obra 'Concorde, 1998'. Cortés estudió Bellas Artes en Sevilla, donde actualmente realiza su tesis doctoral. Mención especial del Jurado fueron las obras de Josep Ternero Sanchis, que presentó a concurso 'Fantasmagoría' y Ana Barriga Oliva, cuya obra 'Sálvate tú' está muy en la línea del universo kitsch que caracteriza a la artista y que se vio recientemente recompensado con el Premio Focus Abengoa de Pintura. 


'Árbol caído' de Sergio Romero Linares


Entre las diferentes obras expuestas llamaron especialmente mi atención la calidad técnica de Tornero Sanchis, con ese fuerte claroscuro potentemente iluminado que contrasta con el fondo negro del cuadro, la geometría y el colorido de la obra de Norberto Gil y el hiperrealismo de Díaz Moreno, que consigue con la técnica del pastel un acabado asombroso. El uso de lo figurativo en una obra de arte no es sinónimo de éxito, una obra puede ser perfectamente reconocible y no decir absolutamente nada mientras que otra de temática abstracta puede llegar a lo más profundo de tu alma. A mí me pasa con la obra de José Guerrero, por ejemplo, que a pesar de no ser más que manchas de color sin ninguna forma definida, consigue emocionarme cada vez que me encuentro ante una de ellas. Lo bonito del arte es precisamente eso, que influye en cada persona de una manera distinta en función del estado de ánimo o de la sensibilidad de cada uno. 


'Fantasmagoría' de Josep Tornero Sanchis


La exposición del Premio Paul Ricard se podrá visitar hasta el 17 de noviembre en horario de Facultad en la Sala Laraña de la Facultad de Bellas Artes.

3 comentarios:

Gabriel M. dijo...

Gracias por tu post, Sergio. Da gusto ver que hay entidades y gentes verdaderamente interesadas en el arte contemporáneo en Sevilla.

Gabriel M. dijo...

La he ido a ver y me ha gustado, sobre todo el cuadro ganador. Sin embargo me ha llamado la atención cierta 'cutrería' en la exposición: ningún cartel exterior que la anunciase, falta de indicaciones claras dentro para llegar hasta la entrada (que está tras un pasaje medio oculto por un andamio), ¡una carretilla estorbando el acceso (sin nadie para llevársela)! cuando llegué, carteles con los títulos y autores demasiado bajos para leerlos con comodidad... ¿Exagero o deberíamos hacer mejor las cosas?

Sergio Harillo dijo...

No exageras, Gabriel, yo también noté todo lo que comentas. Y al menos te has encontrado la sala abierta, a mí me ha pasado en varias ocasiones ir a ver una exposición, encontrarme la sala cerrada y al preguntar en Conserjería encontrarme con un "no sé" como única respuesta.

En cuanto al andamio, forma parte del proyecto Tuenti Urban Art Project. El artista Antonyo Marest está pintando un mural que se inaugurará este viernes.

¡Saludos!