miércoles, 15 de febrero de 2017

¿Principio de acuerdo para desbloquear Atarazanas?




La historia reciente de las Atarazanas nos llega por entregas. Según publicaron ayer varios medios, la Junta de Andalucía y la asociación Adepa habrían llegado a un principio de acuerdo para desbloquear el proyecto de recuperación de este importante bien patrimonial. A pesar de contar con licencia por parte del Ayuntamiento, las obras para transformar las Atarazanas en un centro cultural están paralizadas por orden de un juez desde el pasado mes de octubre a raíz de la denuncia realizada por la citada Asociación. Tras la suspensión cautelar, comenzó un nuevo capítulo en el serial Atarazanas en el que Consejería de Cultura y Adepa se sentaron a hablar sobre cómo desbloquear el asunto.

Diálogo, una palabra tan bonita y tan útil que sin embargo poco ponemos en práctica. El ser humano tiende a imponer antes que escuchar a la parte contraria y en esta falta de diálogo está la semilla de muchos de los grandes males que han aquejado a la Humanidad desde hace siglos. 


Históricamente el acceso a las Atarazanas siempre estuvo en la calle Temprado


Sobre la mesa hay una serie de demandas por parte de Adepa y la Consejería de Cultura parece haber aceptado tres de ellas: eliminar la cafetería que iba sobre la nave de las Atarazanas paralela a la calle Dos de Mayo, cambiar el sistema de micropilotes por otro menos agresivo con el monumento y establecer el acceso al edificio por la calle Temprado y no por Dos de Mayo. En realidad se trata de tres medidas bastante lógicas. El acceso al edificio siempre se ha hecho, desde su construcción en el siglo XIII, por la fachada que da al río. El cambio buscaba facilitar la entrada directa al edificio medieval sin pasar por el volumen construido en el siglo XVIII acercándolo a los bienes monumentales más cercanos, Catedral, Archivo de Indias y Real Alcázar mediante la peatonalización de la calle. Este cambio no debería suponer mayor problema.

En el caso de la cafetería, dicha instalación, de mil metros cuadrados, obligaba a reforzar la estructura medieval del edificio, de ahí los micropilotes. Eliminando la cafetería, se hace innecesaria la obra de refuerzo de los pilares, una intervención que se llevaba gran parte del presupuesto. Con su eliminación quizá haya más dinero para rehabilitar el edificio y actuar en aquellas zonas que se iban a quedar sin recuperar por falta de presupuesto.

Cubierta del salón de actos de Antonio Barrionuevo que el proyecto actual elimina


Las reclamaciones de Adepa no acaban aquí, también insisten en excavar alguna nave para recuperar la cota original del edificio, exponer una réplica de un barco como testigo de la historia de los antiguos astilleros y conservar el salón de actos que Antonio Barrionuevo construyó hace varios años y que el proyecto de Vázquez Consuegra elimina. La excavación de las Atarazanas es un tema del que se lleva hablando durante años, ya hace unos meses la Junta aceptó llevar a cabo un rebaje de la cota en la zona de la muralla para que ésta pudiera contemplarse. Sinceramente, no sé si a día de hoy sigue teniendo mucho sentido pedir que se excave el edificio por cuanto lleva enterrado más de quinientos años. Tan histórico es su relleno actual como su primitiva estructura. En cuanto a lo del barco, no deja de ser un elemento superfluo que habría que tratar cuando se establezca el proyecto expositivo y museográfico del centro cultural. Sí que me parece acertado solicitar la conservación del salón de actos, un espacio muy sugerente que sólo es eliminado por capricho del arquitecto ya que se podría integrar perfectamente en el nuevo proyecto.

Parece mentira que un edificio tan importante como las Atarazanas se vea sometido a un tira y afloja eterno precisamente por la falta de diálogo. Con lo sencillo que hubiera sido convocar a la ciudadanía desde un principio para decidir, entre todos, qué necesidades debía suplir el proyecto y cómo podía plantearse el proyecto. Si se hubiera establecido una hoja de ruta sobre cómo recuperar el edificio, contando con la opinión de todos, quizá se podría haber hecho un proyecto mucho más integrador y nos hubiéramos evitado esta pérdida de tiempo. Ojalá este acercamiento sirva para algo, pero también sería interesante que la Consejería de Cultura escuchara a todo aquél que quiera decir algo sobre el asunto y no sólo a la asociación que ha llevado el tema a los tribunales.


Para saber más sobre el proyecto:

- El proyecto Atarazanas a debate (enlace)
- El Pleno aprueba solicitar la paralización de las obras de las Atarazanas (enlace)
- El Colegio de Arquitectos acoge la exposición sobre el proyecto Atarazanas (enlace)