martes, 14 de febrero de 2017

Malagueando: De visita al Museo de Málaga

Palacio de la Aduana, sede del Museo de Málaga


El 12 de diciembre se inauguró el nuevo y flamante Museo de Málaga y, justo dos meses después, he podido conocer el último gran centro cultural que ha abierto sus puertas en Andalucía. Viajar a Málaga para disfrutar de su oferta cultural siempre es un placer y más cuando te encuentras con un museo tan interesante.

Lo primero que hay que saber del Museo de Málaga es que no es un museo al uso, su división en dos apartados bien diferenciados, Arqueología y Bellas Artes, muestran un panorama bastante completo del arte y el patrimonio de la provincia malagueña, pero al mismo tiempo aconsejan la visita en dos días diferentes para no acabar saturado de información.


Patio principal del Museo de Málaga


El principal protagonista del Museo es el propio edificio, un gran contenedor para una institución con mucho que decir a partir de ahora. El Palacio de la Aduana fue construido entre 1788 y 1826 según proyecto del arquitecto Manuel Martín Rodríguez. Su estilo neoclásico casa a la perfección con la idea que el público suele tener de un museo, un edificio de grandes proporciones y líneas clásicas. La reforma realizada durante los últimos años para convertirlo en Museo no sólo han devuelto toda su luminosidad y prestancia a la arquitectura palaciega de la antigua aduana sino que han permitido reconstruir, en lenguaje contemporáneo, las cubiertas perdidas en un incendio a principios del siglo XX.

Sección de Bellas Artes del Museo de Málaga con la obra 'La tumba del poeta' de Pedro Sáenz y Sáenz en primero término


El Museo se divide en tres espacios. En la planta de acceso nos encontramos las taquillas, la tienda, la sala de exposiciones temporales y el almacén visitable, una interesante propuesta que permite al visitante conocer algunas de las piezas de la colección del centro que no forman parte del discurso expositivo. Unas monumentales escaleras nos llevan a la primera planta donde se encuentra la sección de Bellas Artes. Consciente de sus limitaciones dentro de la Historia del Arte, el Museo de Málaga no hace un recorrido por la misma al estilo de otros centros, sino que toda la museografía gira en torno al propio museo. El visitante conoce de este modo los orígenes de la colección, la importancia de la Academia de San Telmo en la creación del mismo, la simbiosis entre ciudad, comercio, burguesía y arte, así como la gran escuela malagueña del siglo XIX donde las marinas, el retrato y la pintura de historia tuvieron un papel fundamental en la obra de pintores como Moreno Carbonero, Enrique Simonet o Pedro Sáenz y Sáenz. Cierra esta parte toda un ala dedicada al arte contemporáneo, con una interesante colección donde encontramos pintura, escultura y piezas de diseño.

Casco griego del siglo VI a.C. Museo de Málaga


La última planta está dedicada a la arqueología, desde los primeros asentamientos en esta zona de la península hasta la Edad Media. Entre las piezas más destacables sin duda citar el casco griego del siglo VI a.C. hallado en una tumba en la propia ciudad de Málaga o el imponente mosaico romano dedicado a Venus. Reconozco que después de visitar la sección de Bellas Artes no pude dedicar la misma atención a esta parte del Museo, lo que sin duda es un aliciente para visitarlo en un futuro con mayor detenimiento.

'Bailarina' de Elena Álvarez Laverón (1978)


La impresión general del Museo de Málaga ha sido muy positiva. La apuesta por los museos de la capital de la Costa del Sol es de sobras conocida, pero quizá faltaba un centro que hablase sobre la propia tradición artística de la ciudad, un espacio donde conocer su evolución. No puedo acabar este repaso al museo sin hacer una especial mención a todas aquellas personas que durante años se han manifestado para que el Museo tuviera su sede en la Aduana, personas que lucharon por su museo tras el cierre llevado a cabo para instalar en su antigua sede el Museo Picasso. 

Mark Ryden en CAC Málaga


Tras conocer el Museo de Málaga la jornada continuó con una nueva visita al Centro Pompidou, del que ya os hablé en una anterior excursión a la ciudad y culminó en el CAC Málaga con la exposición 'La cámara de las maravillas' de Mark Ryden, una propuesta atractiva y a la vez inquietante. Como comentaba uno de mis compañeros de viaje, de la exposición de Ryden sales con la impresión de que no has entendido nada de nada. Son tantos los detalles en su obra y tan sugerente su lenguaje artístico, que es fácil quedarte en la superficie, en lo estético, sin ahondar en lo que realmente te está queriendo transmitir el artista.

Escultura de Mark Ryden en CAC Málaga


El viaje a Málaga ha coincidido en el tiempo con la ruta que realicé el pasado viernes por diferentes espacios sevillanos. Algo que me ha sorprendido enormemente mientras visitaba los museos malagueños es la cantidad de gente que había en los mismos, con colas de hasta cuarenta minutos en el caso del Pompidou. Que un domingo por la tarde los museos estén repletos de gente es algo que me produce una gran alegría. La impresión que tuve este domingo en Málaga fue que la imagen de 'Málaga capital de museos' ha calado en la población local, de forma que los propios malagueños son los principales usuarios de sus espacios culturales. Esto es algo maravilloso. El pasado viernes visité diez espacios culturales sevillanos y en el único que me encontré gente fue en la Fundación Cajasol donde había un grupo de unas quince personas haciendo una visita guiada. Cierto es que no visitamos ningún museo, pero el hecho de que con un margen de apenas dos días haya vivido dos experiencias tan diferentes me hizo reflexionar sobre el papel de nuestra oferta cultural en el día a día de los sevillanos.

2 comentarios:

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Pasé años sin conocer Málaga hasta que la enfermedad de un amigo le llevó a vivir en Mága por su clima benigno. Desde entonces esta ciudad no me deja de sorprender y espero conocer esta primavera su nueva oferta cultural. Un saludo!!!!

Sergio Harillo dijo...

Seguro que disfrutas la visita :)